DISCOS

Podría decir algo así como que Divididos, parafraseándolos, no han dejado ni 6 ni 22 años tirados ahí en el piso. Con Amapola… vuelven a acariciar lo áspero de todas sus influencias musicales que los convierten en “la aplanadora del rock”. Sonoramente, es rock de guitarras al frente para mecerte o despeinarte, a pesar del rigor mortis del rock actual y del gel o la planchita flogger. Reafirmo así mi admiración a Ricardo Mollo que, en mi opinión, es el mejor guitarrista y cantante de la escena –en ese orden o a la inversa–. Por una parte, se conoce su virtuosismo como guitarrista y que no hace abuso de ello musical ni personalmente. Por la otra, porque, según el tono que se ajuste a la canción, siempre canta en la nota que desea y la extiende, además, el tiempo que desea. Lo que recuerda que hay cantantes argentinos para exportar (no sólo de soja vive el país) y no pasar vergüenza. A lo antedicho sumo que unos decibeles menos solamente o algo contenido hasta que empieza a ladrar funkadélicamente, Diego Arnedo, que es EL BAJISTA, da un paso al costado como coprotagonista del sonido inconfundible del trío. Ahora bien, no logro entender la relación del dúo Mollo-Arnedo con sus bateristas. Cuando uno se acostumbra a ver sentado tras las batas a un excelente
baterista, aparece otro igual con sus propias baquetas en mano. {Este es el momento de Catriel Ciavarella! Y comienzan a deshojar la amapola como en una carrera de postas. Abre Hombre en U con la señal de arranque sonando a rock eléctrico en tu cara para volver al “verdín”; lo releva Buscando un ángel amagando un reggae para transformarse en un rock más clásico llevando “albahacas en el corazón”; es el turno de Mantecoso, otro rock para adelgazar a los mantecosos de la industria y recordar, con un solo de guitarra inolvidable, que se es también hijo de la angustia; recibe el bastón Muerto a laburar con el mismo ánimo rockero para pasárselo a Amapola del 66 – hombre ilusión –, balada de cuerdas para tomar aire, marcando el paso porque “todo está vivo a pesar del dolor…”, dolor que se hace evidente con la emotiva chacarera La flor azul, dolor que se hace más eléctrico y sombrío en Senderos y Jujuy, dupla entrelazada por las palabras de Germán Walter “Churqui” Choque Vilca, poeta tilcareño fallecido en 1987. Utilizando la táctica de desempeñar un cuasi sprint, le toca a Caminando porque Boyar nocturno lo releva casi blusero al tiempo que proclama que “correr por todo, llegar por nada, correr más, más, más, correr sin amor… no, no sé”. El solo de guitarra del Ricardo sale a su encuentro para levantar, lo que no es suficiente, aunque tampoco necesario; pues, “si la entendés, angelitos de carrera” que “no ven la pared”, Avanzando retroceden… Y todo entra el estado acústico y orquestal de las cosas hasta que el Perro Funk toma la posta, incendiario, en las cuatro cuerdas del Diego, el Arnedo, y literalmente ladrando: –“¡Ilumináte…!” para conseguir los laureles y “abrir tu cabeza… para ir más allá” con Todos, o sea, un blues a-lo-Divididos. En fin, si te querés salvar del “morbo pasión, capo de algodón, bandera y ringtone”, he aquí una boya.

DIVIDIDOS
Amapola del 66

CALIFICACIÓN: BRUTUS BRUTUS BRUTUS BRUTUS ½

Gabriel Marquetti Álvarez





Ya pasaron 10 años desde la aparición de su primer álbum Felt Mountain. Este ultimo trabajo no tiene nada que envidiar a sus antecesores, quizás algo más bailable, con sonidos muy 80´s y hasta por momentos me recuerdan a los utilizados por Gary Numan, Yazzo, Eurythmics, etc... Junto a la seductora voz de Alison Goldfrapp y rodeado de melodias bastante electro pop.
Vale la pena, es un álbum para disfrutar a pleno, sorprendente como todo lo publicado hasta el momento por el grupo.



GOLDFRAPP
Head First

CALIFICACIÓN: BRUTUS BRUTUS BRUTUS

Fabian Rodriguez





El nuevo disco del uruguayo radicado en España desde hace algún tiempo, implica un leve cambio a su sonido. Armó una pseudo big band, y decidió grabar el disco con la banda en vivo tocando al mismo tiempo. El resultado es un disco más orgánico que los anteriores, tocado con gran precisión, pero en donde se extrañan los trips electrónicos que supieron condimentar sus anteriores trabajos, y en el cual su gran condición de interprete es el mayor atractivo. Si bien las canciones no quedarán como grandes clásicos, hay un puñado que vale la pena escuchar: Tres mil millones, el bolerazo Toque de queda, Una canción me trajo hasta aquí, y el hip hop orgánico de La trama y el desenlace.


JORGE DREXLER
Amar la trama


CALIFICACIÓN: BRUTUS BRUTUS BRUTUS

Cristian Brutus




Cuando comenzó a sonar el primer track de este álbum triple, me hizo recordar a los primeros trabajos de Kate Bush (The Kick Inside, Never For Ever, Lionheart). Sus letras siguen siendo no letras sino historias o narraciones, su musica coloreada por un harpa manipulada por la misma Newsom.
Un album para oídos exigentes y recomendado para quienes gusten de la musica no ligera, en resumen una exquisitez auditiva y una obra compleja por sus matices por momentos barroco y otros extravagantes.






JOANNA NEWSON
Have one on me

CALIFICACIÓN: BRUTUS BRUTUS BRUTUS ½

Fabian Rodriguez





Como es costumbre desde hace varios años Danny Elfman, musicaliza las películas de Tim Burton o algunas de ellas. La obra cumple con las normas de calidad Disney, los climas son acordes a las escenas y la temática del film.
Quizás no su mejor obra, pero consigue aclimatar al espectador y transformar el film en algo creíble y llevadero de principio al fin.









DANNY ELFMAN
Alice in Wonderland- Banda de sonido

CALIFICACIÓN: BRUTUS BRUTUS ½

Fabian Rodriguez





Hace tiempo que Julieta dejó atrás los años de Tijuano No, y que se adentró en el pop mainstring. Sin embargo, la mejicana busca que sus canciones pop no sean canciones tontas, y en Otra Cosa lo consigue. El nuevo álbum de Julieta Venegas, incluye 12 temas inéditos compuestos en su mayoría por ella misma, además de colaboraciones con Alejandro Sergi (Miranda!), y Adrian Dargelos (Babasónicos) y la producción de Cachorro Lopez. Canciones con guitarras acústicas y eléctricas, sintetizadores, distintos instrumentos de percusión, cavaquinhos, vientos, pianos sutiles (interpretados por ella misma) y, por supuesto, acordeones.
El disco abre con Amores platónicos, y un pop que la acerca a Lily Allen, una bellisima balada pop con aires de ska. Le sigue el corte difusión Bien o mal, compuesto con Ale Sergi, y luego la preciosa Debajo de mi lengua, con Adrián.
El punto flojo que encuentra el disco es la repetición de recursos ya utilizados en su disco Unplugged como los instrumentos de vientos que hay en Revolución.
Puntos altos del disco son Otra cosa, una excelente canción pop, el electropop de Ya conocerán (Lo que a tu lado fui, me lo guardaré, sólo pido que, deje de doler). Lo mismo que Duda, una balada pop para un mar de celulares en alto, o la cumbia experimental Un lugar, sobre un amor que intenta reconstruirse.
El disco cierra con la excelente Eterno, una canción a medio tiempo que marca un duelo entre la esperanza y la desesperanza existencial.


Otra cosa
JULIETA VENEGAS

CALIFICACIÓN: BRUTUS BRUTUS BRUTUS BRUTUS

Cristian Brutus